ESPACIO ALEXANDRA_ ESPACIO DE DIFUSIÓN DEL ARTE CONTEMPORÁNEO
El Espacio Alexandra nace fundamentalmente ante la necesidad de configurar un lugar en el centro de Santander donde se conjugue la enseñanza, la difusión y la información de las artes con una agenda expositiva. En septiembre del 2008 comienza a desarrollarse físicamente este proyecto.
Alexandra G. Núñez dirige el espacio, y gracias al interés de la gente por el arte y a los artistas de distintas comunidades autónomas que colaboran con el espacio, el proyecto va adquiriendo la dimensión esperada.
En abril del 2013, el Espacio Alexandra amplía su campo de actuación creando un nuevo centro dedicado, en exclusiva, al mundo de la gráfica. Así mismo se conjuga nuevamente la formación con un expacio de galería en el que podremos acercarnos a artistas que desarrollen su obra en torno al lenguaje de la gráfica.
En cuanto a la trayectoria expositiva, señalaremos que este espacio ha desarrollado exposiciones de manera ininterrumpida desde hace más de siete años.
FANGO
Es necesario descender al fondo primitivo del alma, asumir las tinieblas, vivir el temor de lo primordial para acceder a la luz
(C. Jung)
El viernes 10 de marzo se inaugura en el Espacio Alexandra la nueva muestra de la artista Vicky Kylander. En esta ocasión se presenta el trabajo más reciente de la artista sueca afincada en Santander.
Fango, es el título de la exposición que recoge una serie de pinturas en las que la artista establece el negro como color dominante y que evolucionan hacia una relación con el espacio mediante la inserción de objetos realizados en arcilla. Estos objetos estético-funcionales suponen la expropiación de algunas de las piezas de la pared para generar diálogo con las otras dimensiones del espacio.
El punto de partida de este trabajo se sitúa en la necesidad de explorar “la oscuridad” desde los distintos aspectos a los que se asocia este concepto. La oscuridad física, la oscuridad emocional o existencial son cuestiones que la artista formula en este trabajo, sin miramientos , a través de la propia materia que es la pintura, con la densidad que los óleos la permiten. Y sobre todo sin la imposición de una representación formal de la realidad. La obra de Vicky Kylander representa la pintura en su estado más puro.