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Gema LLamazares. Pedro Txillida en la Galería Gema LLamazares

Inauguración: 9 de junio de 2011.

Hasta el 9 de julio de 2011.

Texto extraido del catalógo

La perspectiva de ir a Asturias siempre es bienvenida. Debe de ser el deje atlántico

que compartimos. En este caso aun mas dada la procedencia de Gema LLamazares. Casi copamos toda la costa cantabrica.

Gijón siempre ha tenido y tendrá un huequecito en mi corazón por el trato que me ha dispensado a nivel personal y por aquello del “eulogio”. Ademas esta el Sporting de Gijón.

Ya va pasando tanto tiempo dando vueltas a las mismas cosas que me van a sonar

a obviedades. Es que se ha oído uno ya mucho a si mismo. Mi técnica de comunicación ha sido siempre la misma. Decir la verdad. Suele ser extremadamente eficaz, sobre todo si tienes al interlocutor delante.

Eso te da otros recursos; el brillo de los ojos, la expresividad corporal….En este caso la distancia física complica un poquito las cosas.

Que podría decir sobre mi trabajo que a mi mismo me suene a nuevo?. Pues nada.

Ya no hay casi nada nuevo en mi. El barniz que confiere el tiempo a las cosas me baña por completo.

Creo que lo único que de verdad me importa es tratar de ser autentico. Decirme.

El arte es algo así como un método de introspección. Un arma para explorar.

Lo complicado es conseguir que la exploración te interese. Antes era sencillisimo porque apenas sabia algo de lo que era. Todo era nuevo e interesante. Ahora hay que ser mucho mas perro y deshojar la alcachofa.

Te intrigan cosas como tu interés por soledades tipo el monjecito de Caspar Friedrich o esa omnipresente y respetuosa presencia del desnudo. Es como una especie de pregunta sobre

mi yo mas intimo. Quizas el afán de dejar testimonio de lo que se es y se siente. Conste que no albergo la mas mínima esperanza de que sirva para algo. Me imagino que no. Que se trata de algo absolutamente privado que los espectadores pueden contemplar. Igual le sirve a uno mismo, pero creo que ni eso.

La verdad es que releo y me suena de lo mas desesperanzado. A cierta edad tiene uno ya una idea bastante aproximada de lo que es y de lo que son los demás. Ya casi no me interesan mas que los niños. Bueno: las chicas me interesan pero ese es otro tema. Todo es tan repetido que cansa.

En el estudio a veces brilla la esperanza. Brilla como un fanal en la niebla.

Sobre todo haciendo escultura. Entre la mierda y el sudor aparecen trocitos de esperanza, juventud y alegría. Pintando también pero cuesta más. Es mucho mas indirecto y sofisticado. Simplemente no es verdad. Es virtual. Una convención a la que llegamos ustedes y yo de que en el cuadro hay lejanías o personajes que todos sabemos que no están. Lo único real es la pintura como tal, el lienzo, la calidad y cosas así.

Supongo que es eso lo que me hace sentirme mas escultor. Alli todo lo que pasa es real y corpóreo,tangible y pesable. No hay ningún engaño. Creo que eso me conducirá un día a

no ser mas que escultor. Bueno; el tema del dibujo es diferente aunque también sean dos dimensiones.

No se porque pero es algo distinto. Siempre me ha encantado dibujar y supongo que por eso se han llenado mis cuadros de dibujos.

Con todo esto que les cuento sacaran la conclusión de que no me gusta mi pintura pero no es así. Si que me gusta. Lo que no termina de convencerme es “la pintura” como tal. Su misma mismidad. No me gusta lo que me hace sufrir ni lo que me hace estar parado y dudando. Yo

creo que haciendo escultura ni siquiera sufro. Solo físicamente por aquello de las heridas y

dolores, Siempre se que hacer sin tener que volverme loco.

Si creen por esto que les cuento que me siento viejo y gastado también se equivocan. Afortunadamente sigo siendo un crio casi siempre y si me conocieran físicamente les sorprendería por joven. Si es cierto que mis esperanzas sobre lo que el público recibe de lo que uno hace son mínimas. No creo en ellas y ya ni siquiera me importa. Vamos; que no se lo que creo en mi, pero en ustedes…

Como decía bromeando mi padre. No somos nadie,sobre todo algunos.

Lo comprendo. A quien puede interesarle si el liquido deja puntitas oscuras y transparenta y cosas por el estilo mas que al que las hace. Bastante buena voluntad demuestran viniendo

a ver los cuadros.

Bueno. Creo que ya les he insultado bastante por hoy.

Hasta un próximo catálogo

Pedro Txillida

Gema Llamazares Galería de Arte

Instituto 23

Gijón