La Galería Pilar Serra presenta "Siloquies and Soliloquies on Death, Life and Other Interludes" de Edgar Martins

EDGAR MARTINS

Edgar Martins, nacido en Evora (Portugal) en 1977, creció en Macao y en 1996 se trasladó a Reino Unido, donde completó un BA Photography en el London College of Printing & Distributive Trades, así como un MA en Fotografía en el Royal College of Art de Londres. Ha recibido numerosos premios como el New York Photography Award en 2008. En 2009 fue premiado con el prestigioso BES Photo Prize (Portugal) y el Sony World Photography Award en la categoría de paisaje.

En 2010 ganó el 1er premio en Fine Art Abstract Category así como el International Photography Awards. Fue seleccionado para representar a Macao (China) en la 54 edición de la Bienal de Venecia. Edgar Martins se incorpora a la nómina de artistas de la galería y vamos a exponer parte de éste su último proyecto en la feria de Arco, en un stand compartido con José Manuel Ballester, y en nuestro espacio de la galería. El proyecto que presentamos empezó a tomar forma durante la investigación llevada a cabo por el artista en el Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses de Lisboa durante tres años y fue presentado por primera vez en el MAAT –Museo de Arte, Arquitectura y Tecnología/Fundación EDP, en 2016. En este trabajo de investigación se unen imágenes extraídas del archivo personal del artista junto a imágenes encontradas en dicho Instituto.

El proyecto quiere poner de relieve los actos de mirar y representar; a primera vista se propone escrutar, exponer y mantener en tensión muchas de las contradicciones y problemas inherentes a la representación de la muerte, especialmente la muerte violenta, mientras trata de entender el paradójico pero muy fundamental rol que la Fotografía ha jugado en su inteligibilidad y comprensión. Sin embargo, este trabajo es tanto acerca de la muerte como acerca del lenguaje fotográfico y semiótico; en este sentido pretende extender el concepto de Destinerrance, acuñado por Derrida en relación a su obra La Carte Postale, en la que cada carta, cada misiva, según sugiere él, se arriesga a acabar en el sitio equivocado, a ser malinterpretada, a llegar a una dirección errónea… Cada carta escrita llega también a ser una carta muerta, permanece atascada en la oficina de cartas muertas, no devueltas al remitente, direcciones no encontradas, a causa de la inherente cualidad de la escritura de separarse del autor, de circular y continuar con todo su significado mucho después de su muerte. Martins extiende esta noción no solo a las notas de suicidas, sino también a las herramientas empleadas por el suicida, y, más importante, a la Fotografía. Las fotografías y proyecciones que exponemos en la galería y en el stand de la próxima feria de Arco son muy variadas y cada una de ellas nos cuenta una historia o muestra un objeto que el artista fotografía buscando en él la huella del pasado. Edgar Martins pudo disponer de gran cantidad de material nunca antes investigado, que el Instituto puso a su disposición.